YOGA Y FIBROMIALGIA

 FIBROMIALGIA

    Es una desconocida cada vez más conocida. La fibromialgia llega a tu vida sin avisar, incierto, avisa, y durante mucho tiempo.

    Poco a poco vas notando que algo no va bien, empiezas a tener dolores y problemas, que los atribuyes, tu y los profesionales a contracturas, exceso de trabajo, estrés..... etc...

    En mi caso acudí al médico de familia en numerosas ocasiones, estaba preparándome para profesora de yoga, eso es irrelevante, pero en cierta manera no lo es, mi condición física era "mejor" de la media y mi forma de vida "sana". A mi parecer tampoco es irrelevante porque esa preparación, ese estudio y esa practica constante me llevaba a una escucha y conocimiento de mi cuerpo. A esto le añadimos que también soy quiromasajista, conozco, se donde duele y cuando. Pero mi médico me decía una y otra vez cuando acudía que tenía una movilidad mucho superior a la gran parte de sus pacientes.

    Pero como iba diciendo, conocía mi cuerpo y como reacciona en cada movimiento y algo no iba bien.

    Esas pequeñas molestias pasaron cada vez a ser más grandes, a tener dolores y problemas de movilidad, el proceso duró unos tres años.

    Al final, me empezaron a mandar pruebas, riñones, ginecólogos, analíticas, radiografiás.........etc. En todo ese tiempo, no solo acudí a médicos, también, a fisios, naturópatas, osteópatas... y del mismo modo que en la medicina tradicional no encontraban nada la medicina alternativa tampoco.

    Y un día tras un periplo de más de tres años llego el diagnóstico: FIBROMIALGIA.

    Cuantas preguntas se te pasan por la cabeza, cuanto miedo. Yo sabía perfectamente lo que erá, lo que significaba lo que me dijeron en esa llamada, sí, en una llamada, estábamos en pandemia y la noticia la recibí por teléfono. No debe ser necesario mirar a una persona a los ojos cuando con una sola palabra la vida se derrumba antes sus pies. Pues como no es necesario me lo comunicaron por teléfono.

-¿Y ahora qué? (Fue mi pregunta y mi respuesta.)

-Ahora........ tendrás que aprender a vivir con ello.

    Fin de la conversación, bueno no, me recomendó que llamara a mi médica de familia.

    Es doloroso, como digo, sabía de que me hablaba, sabía lo que significaba, tenía, tengo, por suerte, una persona muy importante en mi vida que padece fibromialgia (no es familia de sangre, pero como si lo fuera), y yo llevaba a su lado mucho tiempo, viviendo junto a ella esa enfermedad, que ahora me decían que padecía yo.

    El miedo me invadió. Nada más que decir.

    De ese día ha pasado tiempo y han pasado muchas cosas en mi vida. He estado casi un año sin trabajar, y hace poco me decidí abrir mi propia escuela de yoga. ¿Loca, inconsciente? Todavía no lo se, ya se verá.

    Tenía miedo, me creía incapaz de volver a trabajar, pero ese es un lujo que en la familia no nos podíamos permitir. Así que decidí hacer algo que llevaba muchos años deseando y no me atrevía, si tenia que trabajar y eso para alguien con fibromialgia es todo un reto, por lo menos lo haría en algo que me hiciera sentir bien, en algo que amo. No voy a mentir, hay días que pienso que he sido una inconsciente, y que no voy a poder, que al final me vencerá, son pocos esos días. La mayor parte del tiempo se puede decir que llevo una vida normal.

     ¿Normal? No. Porque trabajo el doble que nunca, trabajo dando clases, en la escuela, en casa, siempre estoy preparando algo, hay que conseguir que funcione, y empezar un negocio de cero es muy difícil y duro. Así que me siento afortunada, aunque hay días que pienso que me he equivocado, pero aun en esos días intento recapacitar y ver lo que estoy haciendo. Mi sueño realidad, a pesar de todas las dificultades que me pone la vida.


¿Por qué cuento todo esto?

     He decidido comenzar con algo personal, sí. Algo en primera persona. ¿Por qué? Pues porque cuando mis alumnos se enteran, conocidos o amigos o incluso familia, la pregunta es ¿Cómo empezó? Me preguntan por cómo me entere, cómo me diagnosticaron, por el proceso hasta ese momento, y después, por la escuela. Les resulta curioso al menos, que una persona con fibromialgia se dedique a dar clases de yoga.

    Y porque pienso que puede ser un aliciente, una esperanza, tener fibromialgia no quiere decir rendirte, quiere decir que tienes que luchar más, sí, pero que no por ello tienes que renunciar a la vida y a los sueños.

    En el año que estuve en casa aprendí mucho. Comencé haciendo caso a lo que el médico me decía, mucha medicación, para dormir, para el dolor, para la depresión y en muy poco tiempo me duplicaron todo. Con todo lo que tomaba y resulta que el cansancio y el dolor no desaparecían, así que empece a buscar otras alternativas. Acudía regularmente al fisio, acupuntura, yoga, meditación, y respirar mucho, naturaleza y estudiar, para trabajar la mente.

    Retome de nuevo mi practica, la había abandonado por la frustración, empezando de cero, escuchando a mi cuerpo y dándole cada día lo que necesitaba, más movimiento, más pasivo, nada, lo que me permitía. Y medité mucho, enseguida me dí cuenta que necesitaba calmar la mente y el sistema nervioso para poder mejorar, así que respire mucho (pranayama), y yoga, cada día comenzaba así. Y mejore, mucho, incluso deje toda la medicación, y así continuo hoy.

    Esta demostrado, 20 minutos de meditación disminuye 40% la sensación de dolor. 

    A todo esto le añado una alimentación saludable, pequeños trucos, cúrcuma, jengibre, un orden en las comidas, bueno, intento no comer por comer, sino comer para nutrirme, eso si, nada de prohibiciones, pequeños caprichos, pequeños momentos, pero al igual que escuchaba al cuerpo a la hora de moverlo, también a la hora de alimentarlo.

    Y todo ese computo me ayudó, me ayuda, y mucho. Mover cuerpo, calmar mente y adecuada alimentación. Todo ello acompañado con un cambio de actitud ante la vida, que esta claro, para mi es el yoga el artífice de ese cambio. Siendo la principal herramienta la respiración, pues a través de la respiración, podemos cambar nuestra forma de pensar, de actuar y ver el mundo. A través de la practica constante se produce la transformación, ese cambio, que empieza fuera y poco a poco va hacia adentro.

    Cuando me preguntan qué es para mi el yoga, mi respuesta es que me ha salvado la vida. Cada uno o una de nosotros habrá vivido este periplo de una manera u otra, pero al final el sentimiento de miedo, inseguridad, incertidumbre y el sufrimiento… y mucho más, lo hemos sentido todos y todas a las que nos han diagnosticado fibromialgia. Y cada uno o una tendrá que buscar sus propias herramientas. La mía el YOGA.





    Todo esto es una pequeña introducción para hablaros de que el otro día en el instituto le pusieron un trabajo a mi hijo, hablar de una enfermedad, realizar una presentación, y él eligió la fibromialgia.

    Lo hicimos juntos, y con el permiso de mi pequeño gran hombre, me gustaría compartirlo. 

    Yo quería poner algunas cosas más personales, o señalar alguna cosilla que no estoy del todo de acuerdo, pero él quería seguir lo que ponía en los diferentes libros que tenemos en casa, un punto de vista más medico o más técnico, y menos personal.

    Me hizo ilusión que decidiera realizarlo sobre la fibromialgia y que lo expusiera en clase. Pensé una manera de hacer visible esta enfermedad, en un instituto hablando de ella.

    Os comparto parte del trabajo que realizamos.


                                            DEFINICIÓN:

  • Enfermedad crónica, cuya causa se desconoce. 

  • Se caracteriza por el dolor músculo-esquelético generalizado.

  • La edad de inicio oscila entre los 35 y 50 años, y se produce mayoritariamente en mujeres.

  • SINTOMAS:

  • Dolor generalizado de músculos y articulaciones.

  • Hipersensibilidad.

  • Fatiga y falta de sueño.

  • Problemas cognitivos, perdida de memoria, problemas de concentración y de aprendizaje. 

  • Ansiedad, depresión. 

  • Otros: Dolores de cabeza, vértigos, mareos, problemas digestivos.

  • CAUSAS:

  • No se sabe cuales son las causas exactas:

  • Hay casos que surgen después de sufrir una infección por un virus o bacteria, en otros tras sufrir un hecho traumático.

  • Hay investigaciones que lo relacionan anivel genético.

  • Se sabe que esta relacionado con el mal funcionamiento del sistema nervioso.

  • ¿Cuándo te diagnostican fibromialgia?

  • Dolor generalizado.

  • Los síntomas están presentes durante tres meses.

  • El paciente no tiene otra patología que pueda explicar el dolor.

  •  DIAGNÓSTICO:

    Antes de llegar a un diagnóstico definitivo la persona que lo padece habrá consultado con multitud de profesionales. Y a que no existe ninguna prueba en la que se refleje la enfermedad. En los nuevos criterios de diagnóstico, y tras descartar otras posibilidades, existen 19 puntos de dolor, a partir de los cuales se diagnóstica y se determina su gravedad.

  • TRATAMIENTO:

  • No existe ningún tratamiento definitivo. Para conseguir paliar los síntomas es recomendable una combinación:

    • Fármacos

    • Psicológica-emocional

    • Rehabilitación-física

    • Nutricional


  • OBSERVACIONES:

  • Es principalmente física pero las emociones juegan un papel fundamental.

  • La actitud positiva es lo más importante.

  • Se recomienda una vida saludable y tranquila: Actividades físicas leves como el  Yoga, y actividades para mejorar el sistema nervioso como la meditación.   

    



    Si soy sincera, hay días y días, y en algunos momentos pienso que no voy a ser capaz, que

no se como voy a poder soportar esto SIEMPRE, es para toda esta VIDA. Y claro que tengo
momentos que caigo, pero por ahora me levanto y eso es lo importante, y aunque se que caeré
de nuevo, espero levantarme cada vez que lo haga, ahora pienso que esa tal vez sea la única
y autentica meta hoy en día.

    Se que queda un duro camino, pero quién dijo que la vida fuera fácil. Puede ser muchas cosas, pero fácil, creo que para nadie lo es, todos tenemos una u otra cosa, o todas a la vez, todos pasamos por momentos amargos y difíciles, la diferencia es la manera en que nos enfrenemos a ellos.

    Del mismo modo que a veces, tengo miedo, a veces dudo, que difícil y que duro es mirar hacia adelante y no ver final, final al dolor, al sufrimiento, al cansancio, a la limitación, a la impotencia, y a tantos y tantos, síntomas y emociones que van unidos a la fibromialgia. Del mismo modo a veces, doy gracias de que esta compañera llegará a mi vida, pues hoy no sería quien soy. Desde el principio, bueno, me costo un poco, pensé que había venido para enseñarme algo, que había llegado para algo, y aquí estoy aprendiendo, y uno de esos aprendizajes es verla como una compañera y no como una enemiga, aunque haya días que cueste, y mucho. Eso si, creo que me ha hecho mejor ser humano. Y desde luego me ayuda a estar orgullosa de mi misma por no dejarme vencer. Soy consciente de que la vida es muy larga, o muy corta, según como se mire, y que sé que puede haberque habrá, días y días, sólo pido fuerzas para levantarme cada vez que me caiga, y encima estoy convencida de que lo haré. Esta enfermedad, por lo menos a mi, me esta ayudando a valorar la VIDA, la VIDA con mayúsculas, ya que no hay tiempo ni energía que perder. 

     Como suelo decir, “hay que darle la vuelta a la tortilla”, a veces para ello necesitamos un tiempo, y también en eso tenemos que se amables con nosotros, darnos ese tiempo.

          
 Me gustaría terminar como suelo hacerlo:

YO TENGO FIBROMIALGIO PERO, NO SOY LA FIBROMIALGIA.

Cierto, en el taller de hipnosis que realizamos en la escuela, una compañera me recordó, que
tengo fibromialgia, es ya identificarme, así, que cambiaré, "me diagnosticaron fibromialgia".


EL UNIVERSO TAL VEZ NO TE DE LO QUE DESEAS PERO SI LO QUE NECESITAS.

  

Os dejo el enlace de mi canal, lo realice el tiempo que estuve en casa, espero poder retomar
de nuevo en algún momento.


Y la página web de mi escuela, un sueño que no ha hecho más que comenzar.

    Para mi el yoga me ha salvado, os recomiendo que lo probeis, y si no os encaja seguir buscando, buscar esa herramienta que os ayude. 

    Una cosa esta clara, cuanto menos mueves el cuerpo más se atrofia y más cuesta moverlo después. Sin ir más lejos, un fin de semana, un puente, en el que no hago nada, llega mi primera clase del lunes y no os lo podréis creer, o si, pero no puedo casi ni moverme, sin embargo después de toda la semana practicando, acompañando a mis alumnos, hasta yo me asombro de lo que es capaz de realizar mi cuerpo, la energía y la vitalidad que siento, y como se mueve, es increíble. No sólo por el movimiento, eso esta claro, consideró que la respiración es la clave, el pranayama y la meditación, todo lo anterior es una preparación para ello, tanto física como mentalmente.

    Como me dice una amiga muy querida, "a ti, te han engañado, tu no tienes fibromialgia", jajajaja, que más quisiera yo. Yo le respondo, "no me ves cuando llego a casa, hay días que soy un trapo, una marioneta, o no me ves esos fines de semana que no puedo levantarme de la cama, porque ni el cuerpo ni la mente me responden", no, no lo ven. Pero nosotras y los que viven con nosotras sí, no solo lo vemos, lo sentimos.

    Si que eso me sucede claro que si. Os invito, solo por curiosidad a que visitéis mi canal y veáis con vuestros propios ojos los cambios que se pueden llegar a producir, recordar la fibromialgia nos acompaña en todo momento, pero en ocasiones nosotras somos las que la vencemos. 







Un abrazo de algodón.

Namaste.






Comentarios

Entradas populares de este blog

Tipos Asanas

MOVIMIENTOS DE LA PELVIS. Retroversión y anteversión.

SIRSASANA